Desde sus inicios dentro de la farándula, Nico Occhiato siempre se ha caracterizado por evitar al máximo los escándalos y los conflictos.
El exnovio de Flor Vigna intenta mantener un perfil bastante bajo en cuanto a cuestiones de su vida personal, pero sobre todo, a Nico Occhiato no le agrada tener que hacer frente de manera pública a problemas laborales.
Días atrás se supo que Belu Lucius ya no formaría parte del staff fijo de “Luzu TV”, un medio de comunicación alternativo que nació hace algunos años, y del cual Nico Occhiato es el dueño.
La producción decidió desvincularla porque se iba todo enero y el programa necesitaba alguien que estuviera para poder salir desde la costa. Yo hablé con ella y está todo bien.
El periodista fue interceptado por un móvil de “Socios del Espectáculo”, ciclo de chimentos de El Trece, y allí finalmente se sinceró al respecto.
En principio, la hermana de Emily había dicho que por otros proyectos prefería dar un paso al costado, sin embargo, luego trascendieron algunos chats de ella con una seguidora de Instagram, donde relataba que la habían desvinculado
de la noche a la mañana.
En el ojo de la tormenta
De un tiempo a esta parte el nombre de Nico Occhiato no para de ser noticia, algo de lo que él no parece disfrutar ni un poco.
Primero fueron las aparentes peleas con la novia de Luciano Castro en el set de grabación de “El Último Pasajero”, luego los supuestos romances con Naza Di Serio, Natalie Pérez y Nati Jota, y ahora esta polémica rescisión de contrato con la influencer que trabajaba en uno de sus proyectos.
Fuente Minutoneuquen